Paolo Guerrero le hizo un pedido explícito este jueves a los dirigentes de la Universidad César Vallejo y es que lo dejen libre porque necesita trabajar y jugar luego que se conoció que la institución “Poeta” está dispuesto a que el goleador cumpla su contrato de dos años, a pesar de las amenazas recibidas por su madre de presuntos extorsionadores.
La situación contractual existente entre Paolo Guerrero y el club César Vallejo está lejos de resolverse de manera rápida luego que el propio jugador decidió no jugar por la escuadra “Poeta” debido a la existencia de amenazas de extorsionadores en atentar contra la vida de sus familiares si no “colabora” (da dinero).
Paolo Guerrero lamentó la postura que tienen los directivos de la Universidad César Vallejo, quienes le enviaron una carta notarial conminándolo a que se presente el sábado a la regio La Libertad para que sea presentado.
“Richard Acuña sabe de la gravedad del problema, Acuña ha conversado con mi madre y lo toma con tibieza. Él vio la preocupación de mi mamá que conversó con él. No es nada inventado, no es un capricho ni nada de esto, yo estaba ilusionado con todo eso”, señaló el delantero de 40 años.
El propio futbolista precisó que la institución norteña no quiere dar su brazo a torcer por lo que pide que lo comprendan y lo dejen libre, ya que necesita trabajar y jugar.
“El club me la está haciendo un poco difícil, a pesar de los problemas que están pasando. Necesito trabajar, necesito jugar”, reclamó el goleador.
Asimismo, el abogado del deportista, Julio García, confirmó que Guerrero no llegará al Perú para sumarse a César Vallejo y que están pidiendo la terminación amistosa del contrato con los trujillanos.
“Todo esto nace fruto de una descoordinación interna, recibimos una carta anoche que desconoce las amenazas y todo esto, estamos preocupados. Paolo Guerrero no va a venir, tiene que definir el club Vallejo, si la carrera de Paolo acaba aquí o si lo dejan libre. Ya depende de ellos si sigue jugando o ya no”, señaló.
El mismo representante del jugador adelantó que espera los dirigentes del club norteño recapaciten y dejen libre al jugador para que así pueda buscar equipo hasta antes del 26 de febrero, fecha en el que cierra los libros de pases en la mayoría de países de Sudamérica.